Ismael (1 Sm 1; Gál 4,21-31)
161Saray, la mujer de Abrán, no le daba hijos; pero tenía una sierva egipcia llamada Hagar.
2Y Saray dijo a Abrán:
-El Señor no me deja tener hijos; llégate a mi sierva a ver si ella me da hijos.
Abrán acepto la propuesta.
3A los diez años de habitar Abrán en Canaán, Saray, la mujer de Abrán, tomó a Hagar, la esclava egipcia, y se la dio a Abrán, su marido, como esposa.
4Él se llegó a Hagar y ella concibió. Y al verse encinta le perdió el respeto a su señora.
5Entonces Saray dijo a Abrán:
-Tú eres responsable de esta injusticia; yo he puesto en tus brazos a mi esclava, y ella, al verse encinta, me pierde el respeto. Sea el Señor nuestro juez.
6Abrán dijo a Saray:
-De tu esclava dispones tú; trátala como te parezca.
Saray la maltrató y ella se escapó.
7El ángel del Señor la encontró junto a la fuente del desierto, la fuente del camino de Sur, 8y le dijo:
-Hagar, esclava de Saray, ¿de dónde vienes y adónde vas?
Ella respondió:
-Vengo huyendo de mi señora.
9El ángel del Señor le dijo:
-Vuelve a tu señora y sométete a ella.
10Y el ángel del Señor añadió:
-haré tan numerosa tu descendencia, que no se podrá contar.
11Y el ángel del Señor concluyó:
-Mira, estás encinta y darás a luz un hijo y lo llamarás Ismael, porque el Señor te ha escuchado en la aflicción. 12Será un potro salvaje; él contra todos y todos contra él; vivirá separado de sus hermanos.
13Hagar invocó el nombre del Señor, que le había hablado:
-Tú eres Dios, que me ve (diciéndose): ¡He visto al que me ve!
14Por eso se llama aquel pozo "Pozo del que vive y me ve", y está entre Cades y Bared.
15Hagar dio un hijo a Abrán, y Abrán llamó Ismael al hijo que le había dado Hagar. 16Abrán tenía ochenta y seis años cuando Hagar dio a luz a Ismael.
Explicación.
16,1-3 Retorna la vida familiar, regida por las leyes matrimoniales de la época. Si la mujer legítima es estéril, ha de proveer una concubina al marido, aunque sin perder su rango y derechos. La ley excita los sentimientos de los tres personajes, bien descritos con breves rasgos. Pero ley y sentimientos se inscriben en un contexto más amplio: el plan de Dios sobre Abrán.
No será la ley la que, con su ficción jurídica, asegure una descendencia al anciano, sino la palabra de Dios, que se cumple contra las previsiones humanas.
16,4 Véanse Prov 30,21-23; Eclo 25,4 "Ninguna pelea como la de las rivales, ninguna venganza como la de las émulas".
16,5 Reclamación legal, con amenaza de apelar al juicio de Dios: el pleito se plantea entre Abrán con Saray, no con Hagar. Parece insinuar que, al sentirse padre, Abrán trata con privilegio a la esclava. Eclo 25,14.
16,7 Un mensajero celeste o una aparición de Dios.
16,8-10 La relación jurídica de ama y esclava persiste. Ahora bien, por su relación con Abrán, Hagar participa de la bendición patriarcal de fecundidad. (Una tradición la hace matriarca de los Agarenos).
16,11-12 Esquema clásico de anunciación (Jue 13; Lc 1,28-33); concepción, nacimiento, nombre explicado, futuro del niño. El nombre significa Dios-escucha/e. Figura como antepasado de los ismaelitas.
16,11 Is 7,14-16.
16,12 Job 39,5-8.
16,13-14 El texto es dudoso. Otra alternativa: el Dios visible (manifiesto); ¿no he visto por detrás al que me mira? El nombre del pozo añade "vivo". La mirada de Dios es interés y protección, la de Hagar es descubrimiento: dos miradas se encuentran junto a un pozo que guarda el recuerdo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario